miércoles, 19 de octubre de 2011

La vida en tres tiempos

Mariana con M de Música.
Eusebio Ruvalcaba.
Editorial Bastardos de la Uva.
México, 2011.

Se ha dicho que los escritores son seres que viven intensamente y por eso se consumen más rápido que cualquier otro mortal. Tal vez esta aseveración sea un lugar común, una leyenda. Sin embargo, encierra cierta verdad. Esto no significa que el escritor nazca mejor dotado que otros individuos para percibir el mundo que lo rodea, sino que su vocación le exige adiestrarse en la búsqueda de la materia prima con la que crea su obra.

Instantáneas IV

Manuel

Ella se peina frente al espejo. Mientras desliza el cepillo por su larga cabellera oscura le vienen los recuerdos por oleadas. Se acuerda de Manuel y ella haciendo castillos de arena en la playa. De las vacaciones en que Manuel la enseñó a montar a caballo. De la noche que la recriminó por llegar tarde y de la mala cara que siempre le ponía a sus novios. Quiere mucho a Manuel pero le disgusta que sea un hermano celoso. Ella lo entiende porque crecieron juntos y nunca se han separado. Ni cuando murió mamá. Piensa todo esto mientras se cepilla y luego cuando deja el peine y empieza a trenzarse el cabello parsimoniosamente. Piensa que debe ser fuerte y no mostrarse llorosa frente a él. Piensa solamente en las cosas bonitas que vivieron juntos. No quiere recordar que fue ella quien lo enseñó a maquillarse ni de la noche en que papá lo corrió de la casa. Ella sólo quiere pensar en las cosas agradables. Se acuerda de la sonrisa de Manuel acariciando su pelo suelto. Desde que tenía doce años ella sólo se recorta las puntas cada dos o tres meses. A pesar de que él se lo dejó crecer y lo cuidó con el mismo esmero, nunca tuvo un cabello tan bonito.

En ese momento, Angel entra a su cuarto para avisar que Manuel quiere hablarle. Ella dice que no tarda. Aunque se le hace un nudo en la garganta se aguanta las ganas de llorar. Toma unas tijeras del tocador y se corta la trenza. Cuando entra al cuarto de Manuel, el doctor le dice, en voz baja, que se despida antes de que le inyecten un sedante a su hermano. Ella pone la trenza entre sus manos y Manuel hace un gesto que se agota antes de ser sonrisa. Cuando sale del cuarto, Angel está llorando y se le acerca para abrazarla y decirle: ¿por qué mejor no fui yo?     

domingo, 9 de octubre de 2011

Once peleas por nocaut

Cuentos y relatos de Fiestas.
Pterocles Arenarius.
Eterno Femenino Ediciones.
México, 2011.
Hace 26 años, en el taller de cuento de Edmundo Valadés, escuché el testimonio de un chamaco sparring que subía al cuadrilátero con Mantequilla Nápoles, como parte del entrenamiento de esa leyenda del boxeo.


Seis aforismos para un domingo

·         Aunque se pierda en la larga cuenta de los días de una vida luminosa, con un día oscuro es suficiente.

·         El hombre es el animal más presuntuoso y más ridículo porque se siente el amo de la naturaleza hasta que los instintos lo obligan a ponerse en cuatro patas.

·         En un mundo donde se confunde la mierda con el oro, uno vale por su capacidad de rechazo.

·         Los sentidos nos hacen vivir el presente. La memoria y las emociones nos hacen revivir el pasado. Solamente la imaginación nos instala en el futuro.

·         Cuando lo que más vale de una persona es su dinero, es que esa persona casi no vale nada.

·         Hay que escribir con el mismo pulso con que se sirve el vino.

martes, 16 de agosto de 2011

La risa que ilumina

Balas en los ojos. Historia de un suicidio.
Gabriel Rodríguez Liceaga.
Zeta. Ficción. México, 2011.

De Gabriel Rodríguez Liceaga se podrían decir muchas cosas, que  leía a Cortázar y a Sabines aun antes de saber leer; que es especialista en pasiones de adolescente y fanático feroz del Cruz Azul, que disfruta por igual cantinas y talleres literarios, y que ha llevado el comentario de facebook a la concisión y lucidez del aforismo. Hoy también podemos decir, sin temor a equivocarnos, que es un escritor con estilo propio.

Su cuento “Las manos sin Julia”, se publicó hace seis años en una antología en la que aparecieron figuras señeras de las letras nacionales como Guillermo Fadanelli, Hernán Lara Zavala o Vicente Leñero, acompañadas de párrafos que pormenorizaban sus deslumbrantes trayectorias. De Gabriel solamente se decía que nació en Tepito. Esa presentación distinguió a su texto, tal vez el mejor de aquella recopilación. Este año, después de probar su solvencia como cuentista ganando el premio María Luisa Puga, Gabriel se decidió a entregar la novela que hoy nos convoca.

martes, 24 de mayo de 2011

Instantáneas III

Rumba O

Hay quienes trabajan para vivir. Hay quienes trabajan para comprarse una casa o un coche. Los que vienen aquí, trabajan para reventarse. De miércoles a sábado, alrededor de estas mesas adornadas con margaritas, puede encontrarse la misma clientela más uno que otro colado: Gaby, que trabaja como instructora de aerobics y como modelo; las güeras que esperan la oportunidad estelar en el cine mientras aparecen en video homes; los dominicanos y sus novias de ébano; Hugo y sus compañeros de la bolsa; Manuel, Paco y su mesa repleta de amigos. Los mismos clientes de siempre menos uno.

lunes, 9 de mayo de 2011

Zócalo, 8 de mayo de 2011

(Discurso de Javier Sicilia en la Marcha por la Paz con Justicia y Dignidad).

"Tal vez la era se convierta por completo en un tiempo de penuria. Pero tal vez no, todavía no, aún no, aun a pesar de la inconmensurable necesidad, a pesar de todos los sufrimientos, a pesar de un dolor sin nombre, a pesar de la ausencia de paz en creciente progreso, a pesar de la creciente confusión". Heidegger.


"(Nuestro) peso es (nuestro) amor; a donde quiera que se (nos) lleve, es él quien nos lleva. (Ese) don que proviene de (nosotros) nos inflama y nos eleva: (nosotros) ardemos y vamos". San Agustín.

Hemos llegado a pie, como lo hicieron los antiguos mexicanos, hasta este sitio en donde ellos por vez primera contemplaron el lago, el águila, la serpiente, el nopal y la piedra, ese emblema que fundó a la nación y que ha acompañado a los pueblos de México a lo largo de los siglos. Hemos llegado hasta esta esquina donde alguna vez habitó Tenochtitlán; a esta esquina donde el Estado y la Iglesia se asientan sobre los basamentos de un pasado rico en enseñanzas y donde los caminos se encuentran y se bifurcan; hemos llegado aquí para volver a hacer visibles las raíces de nuestra nación, para que su desnudez, que acompañan la desnudez de la palabra, que es el silencio, y la dolorosa desnudez de nuestros muertos, nos ayuden a alumbrar el camino.

jueves, 21 de abril de 2011

Las múltiples posibilidades de la masculinidad I

(Entrevista con Ricardo Pérez Monfort, para la serie Entre hombres sin vergüenzas de Radio Educación).

Doctor en Historia por la UNAM, miembro del Sistema Nacional de Investigadores y de la Academia Mexicana de Ciencias, Ricardo Pérez Monfort ha dedicado su vida a la investigación y la enseñanza. Sus estudios sobre las dinámicas políticas y culturales de México han abarcado diversas épocas y lugares, desde la cultura popular del siglo XIX hasta el comienzo del discurso en contra de las drogas en los años cuarenta.

La mirada de Pérez Monfort también se enfoca sobre la historia de la fotografía y el cine, de los cuales es un auténtico experto. En sus más de veinte libros publicados ha venido delineando el mapa de la cultura y la política mexicana de los dos últimos siglos.

Ha ganado consecutivamente los premios a la mejor tesis de Maestría y Doctorado de la UNAM, en 1989 y 1992 respectivamente, así como el premio García Cubas para el mejor libro de divulgación histórica del INAH. Ha colaborado en las más prestigiosas revistas de su especialidad y ha impartido conferencias sobre temas mexicanos lo mismo en universidades de Estados Unidos que de Alemania.

domingo, 10 de abril de 2011

El fruto de las palabras

Ni una gota.
Diana Violeta Solares Pineda.
Molino de Letras. México, 2010.

Existe una idea generalizada acerca de que los autores escriben libros como si cultivaran un fruto. Una manzana de oro que va a proveer el alimento de la sabiduría a los lectores que la consumen. Por eso los escritores, por muy malditos que sean, gozan de cierto respeto y como en la película de Pinocho, hasta los zorros y chacalones los reconocen como “literatos”, especie por demás exótica pero “interesante”. La cultura siempre genera un extraño prestigio que no se corresponde con su popularidad. Es importante pero muy aburrida.

Instantáneas II

Araña en el Espejo


Fue un viernes de quincena, el día de mayor afluencia, no se me olvida. Revuelto el ambiente: el tabaco americano con los aromas empalagosos del sudor rancio. Las parejas se desparramaban de la pista, apretadas y confundidas en el vértigo de timbales y trompetas. Rubén, el mesero del arete, le abrió paso al mensajero fatal: un flaco serio de lentes y gabardina, sin ningún chiste. Imposible encontrar mesa.

viernes, 8 de abril de 2011

Estamos hasta la madre

(CARTA ABIERTA A LOS POLÍTICOS Y A LOS CRIMINALES)


por Javier Sicilia

El brutal asesinato de mi hijo Juan Francisco, de Julio César Romero Jaime, de Luis Antonio Romero Jaime y de Gabriel Anejo Escalera, se suma a los de tantos otros muchachos y muchachas que han sido igualmente asesinados a lo largo y ancho del país a causa no sólo de la guerra desatada por el gobierno de Calderón contra el crimen organizado, sino del pudrimiento del corazón que se ha apoderado de la mal llamada clase política y de la clase criminal, que ha roto sus códigos de honor.

domingo, 3 de abril de 2011

Chinga tu madre

Elogio a la mentada

Es una expresión sumamente popular pero muy agresiva, la máxima injuria en el repertorio de insultos nacionales. Por ella dos mexicanos pueden matarse o demostrar la más entrañable amistad intercambiándola como saludo. Es la muy mentada Mentada.

martes, 15 de marzo de 2011

Edipo Gay

Mató a su madre para casarse con su padre.








(Esta minificción la escribí en 1985 y la publicó la revista El Cuento en su número 101).

Primero que nada te haces hombre de palabra

(Entrevista con Agustín Ramos para la serie Entre hombres sin vergüenzas de Radio Educación).

Nacido en Tulancingo, Hidalgo, en 1952, ha sido considerado un autor de grandes recursos y madurez estilística desde su primera novela Al cielo por Asalto (1979), escrita a los 25 años. En ella se marca el tránsito de una generación que pasó del rock a la guerrilla a través de una trágica búsqueda existencial. En más de tres décadas de carrera literaria Ramos ha publicado más de una decena de libros entre novela, cuento y ensayo histórico. Considerado como uno de los escritores más sólidos de su generación, Ramos también se ha desempeñado como funcionario en la dirección del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Hidalgo, donde desarrolló proyectos tan importantes como el museo interactivo El Rehilete de Pachuca. Actualmente se dedica al periodismo y acaba de publicar su más reciente novela Olvidar el futuro (Tusquets, 2010), que narra las aventuras de un escritor que quiere asesinar al hombre más rico de México.

lunes, 7 de marzo de 2011

La sombra del otro*

Un aforismo de Eusebio Ruvalcaba afirma que “La literatura es un grito de libertad proveniente desde un borbotón de fuego, desde el pecho encendido de un hombre”. De ahí que uno se imagine a los escritores como una especie de tragafuegos que se comen la lumbre a puños. La leyenda de los malditos ha impregnado el quehacer literario desde hace más de dos siglos. Quien por rapto de locura, crisis espiritual o acto de rebeldía elige este oficio, pertenece desde el mismo instante de la publicación de sus primeros intentos a la “perduta gente” de la que hablaba Alfonso Reyes.

sábado, 5 de febrero de 2011

Instantáneas I

Los que se van, tardan mucho en marcharse. Persisten escondidos en el gesto de algún otro, en el hueco gris de las conversaciones, en la letra de una canción, en la angustia del sueño repetido, en la vejez prematura de las fotografías.
En ésta, aparecen alrededor de una mesa, Paco y su violenta carcajada, abrazado de Manuel con barba negra y sombrero, abrazado de Hugo que levanta su vaso en un brindis eterno.

En la otra apareces tú, bailando con Angel.

Estas fotografías las guardo en un viejo álbum entre tarjetas de presentación y pétalos secos. Amontonadas en un baúl, tengo otras fotos, cientos de ellas, de otra gente que ya no conociste y que también se me quedaron.

Yo, que las tomé, no aparezco nunca. Me basta con recordar cómo eras entonces.

¿Y si hubiera aparecido yo? ¿Y si fueran ustedes los que me estuvieran viendo?

¿Qué pensarían?

Invocación


Tu nombre es la palabra que en silencio
se fue gestando en mi costado,
la luz que muy adentro amanecía.

El verbo que el misterio
conjugó con el sueño,
memoria gris de mi esqueleto.

Tu nombre simplemente
desnudo y solo.

Peregrino del yunque del oído
errante caracol entre los ecos
recorre su camino en mi hemisferio.

Va en busca de la voz
que lo haga cuerpo.

Tu nombre de pies descalzos
y sangre viva.

Ceniza de la noche
relámpago de lluvia
trueno y espuma.

lunes, 17 de enero de 2011

Aforismos de OGTperro

• Al principio uno aprende a hablar para después aprender a callarse.

• Al que tiene más hambre siempre le sirven al último.

• A los amigos se los conoce en la cárcel y a las amigas en la cama.

• En las batallas del amor el verdadero triunfo no consiste en que uno de los contendientes venza al otro, sino en que los dos se pierdan.

• En las frutas como en la vida: la cáscara debe ser dura y amarga, pero la carne suave y dulce.

• Llega un momento en que la vida comienza a cobrarnos las facturas hasta de lo que no le debemos.

• Hay que hablar menos de lo que uno sabe, saber menos de lo que uno piensa y pensarse menos de lo que uno es.

• La finalidad del sexo es el placer y la continuidad de la especie. La finalidad del arte es el placer y la continuidad de la imaginación.

• Los que hablan de Dios en tercera persona son farsantes. Los que hablan de Dios en primera persona son ególatras. Los que hablan de Dios en segunda persona son los que en verdad quieren conocerlo.

• Las fortalezas nos sirven para defendernos. Son las debilidades las que nos hacen atacar.

• Mi ética es nada más que una intuición que no me dice lo que debo hacer sino dónde no debo estar.

• En un mundo de vencedores imbéciles más vale ser un derrotado.

viernes, 14 de enero de 2011