Ropa limpia, recién lavada. Una falda gris con arrugas en la cintura, un suéter azul rey todavía húmedo, un delantal a cuadros rojos salpicado de minúsculas manchas de grasa y una bata blanca sembrada de verdes tréboles. Ropa seca, lista para plancharse.
domingo, 13 de septiembre de 2009
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