El 27 de septiembre de 1821 los 16 mil efectivos del Ejército Trigarante toman esta calle con rumbo al Zócalo. El general Agustín de Iturbide va al frente, montado en un gran caballo negro, vestido con traje austero y sombrero de tres plumas en las que relucen los colores de su bandera: verde, blanco y rojo. Lo siguen sus dragones de riguroso uniforme y la infan
tería estrenando calzado recién comprado con dinero de las funciones que un teatro presenta a beneficio de los libertadores. A la retaguardia marcha el general Vicente Guerrero acompañado de los pintos del Sur, sus bravos veteranos que a pesar de ir en harapos, desfilan con orgullosa disciplina militar. Los capitalinos les aplauden y les arrojan flores.















